Con la reducción de las becas de libros se están poniendo en marcha desde las Ampas y, desde algunas administraciones, bancos de libros usados para "mitigar" la falta de ayudas en la compra de material escolar.
Se plantean métodos, instrucciones o fórmulas de actuación para los centros en la medida en que estos asumirán una nueva función; de bancos de libros de texto, con la intención de que en septiembre esté preparada una logística para recoger libros usados , aportados por anteriores alumnos, o por asociaciones de padres y madres de alumnos que serán clasificados y entregados después a las familias que lo necesiten.
El Gobierno de Cantabria, desde el Consejero de Educación ,Miguel Ángel Serna, dice que " es responsabilidad del Gobierno de Cantabria priorizar" y opina que tener libros nuevos o usados no es prioritario y, mantener el profesorado o el número de alumnos por aula si son prioritarios para mantener la calidad de la educación.
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